Trabajadores sexuales masculinos en la calle

mexico

16 mayo 2018

 

En Zona Rosa, los trabajadores sexuales son invisibles para quienes no conocen los códigos del lenguaje corporal. Estos jóvenes prostitutos se hacen visibles al mover su cuerpo de cierta forma cuando ven a un cliente potencial. ¿Cómo se regula esta (in)visibilidad? ¿Cómo estos jóvenes articulan el espacio público virtual (los lugares de encuentro) y el espacio físico?

 

La zona Rosa es un barrio céntrico conocido por sus espacios de homo-socialización. Localizado muy cerca del centro histórico, del corredor de élite llamado Reforma, es un lugar visitado por muchos turistas y locales. Es el núcleo de la «identidad gay» de México. Es también un espacio para el trabajo sexual masculino en la calle. Pero la mayoría de los trabajadores sexuales masculinos no se identifican como gays, sino que tienden a identificarse a ellos mismos como hombres.

 

¿Cómo los trabajadores sexuales masculinos regulan su trabajo? ¿Cómo juegan con la (in)visibilidad? ¿Cómo definen y representan su masculinidad? ¿Cómo ha cambiado su trabajo con el creciente uso de plataformas en línea o digitales? ¿Cuál es la relación entre la calle, la web, los bares y los hoteles? Para la mayoría de los trabajadores sexuales masculinos, a los 30 años ya eres viejo, ¿cómo entender la juventud en este contexto?

 


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Transcripción

 

«Realmente la geografía es la reflexión de los fenómenos en donde el ser humano está involucrado y cómo esos fenómenos propios del ser humano tienen una interacción con el entorno, a lo que nosotros denominamos este espacio geográfico. Entonces tendríamos que asumir que el ser humano en su devenir, presenta similitudes y diversidades dependiendo de circunstancias propias del espacio social en el que vive.

De ahí yo creo que sea muy interesante esta reflexión del trabajo sexual masculino para este proyecto de TrySpaces dentro de la geografía, porque permitirá reflexionar sobre la interacción sexual comercial de los individuos a partir de  circunstancias que rodean a este propio fenómeno de la sexualidad,  que tiene que ver con las normatividades de la Ciudad de México, que tiene que ver con la tradición social y costumbres de la población, y en qué medida esta cuestión social y cultural condicionan determinados comportamientos o no, los facilitan o los limitan. Entonces un estudio de la sexualidad y del comercio sexual masculino, pues implica conocer a complejidad las diferentes interacciones que limitan o fomentan esta dinámica en términos espaciales.

Una pregunta muy interesante para este proyecto sería si realmente estos jóvenes que están haciendo uso de este espacio público, de alguna manera lo transgreden o no en la medida en que el ejercicio de su trabajo es de la manera más discreta posible, procurando no irrumpir en ese entorno, es decir,  el trabajo sexual a fin de cuentas se realiza en la noche, ya muy tarde. Hay un código de contratación entre los contratantes y entre los ofertantes, que de alguna manera esta serie de códigos básicamente los manejan los personajes implicados en esto. Esta sería una pregunta muy interesante en la investigación, ¿hasta qué grado llega la transgresión?

Otro de los asuntos que me parece interesante en este proyecto es la cuestión de qué es el espacio público. ¿El espacio público se queda solamente en la reflexión de la calle o también involucra otro tipo de ámbitos, como la cuestión virtual, como internet? Y La pregunta es ¿ha disminuido el comercio y el trabajo sexual?

El concepto de lugar es comprender el espacio en función de las emociones, los sentimientos que los individuos le atribuyen a ese espacio en función de sus vivencias. A fin de cuentas aquí se juegan muchos elementos de relaciones de poder, como lo es el dinero, como es el cuerpo, como es la juventud. Este tipo de circunstancias pues determinan ires y venires en estas relaciones entre dos varones.

Yo creo que dar a conocer este tipo de fenómenos permite ver en la diversidad que como sociedad tenemos y las libertades que todos los individuos buscan. Entonces así como hay espacios de diversión también están los espacios de la sexualidad. Y entonces yo creo que debemos como sociedad prepararnos para estar abiertos a las diferentes formas de interacción sexual, siempre que hay un consenso entre las parte involucradas.»


 

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